EGF (Epidermal Growth Factor)
EFG (Epidermal Growth Factor)
Los factores de crecimiento epidérmico son una familia de varias proteínas naturalmente presentes en nuestro cuerpo. Son un componente clave del proceso de crecimiento y regeneración celular. Diariamente, son responsables de desencadenar la regeneración de las redes microvasculares y mejorar la cicatrización de las heridas iniciando la síntesis de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
El Factor de crecimiento epidérmico (epidermal growth factor, EGF) fue descubierto en la década de los ´60 por Stanley Cohen y Rita Levi-Montalcini que les valió el Premio Nobel de Medicina en el año 1986. Sólo muy recientemente (desde menos de 10 años), los científicos son capaces de producirlos de una manera segura y estandarizada.
¿Cómo funciona el EGF?
Los factores de crecimiento son moléculas naturales que actúan como mensajeros celulares, transmiten instrucciones de crecimiento, multiplicación, movilidad y regeneración a los diferentes tipos de células. Son un elemento fundamental en el buen mantenimiento de la piel y numerosos estudios avalan excelentes resultados en el proceso de curación. Desafortunadamente, sus niveles de concentración tienden a disminuir con la edad. Es por eso que procesos como la destrucción del colágeno, que se produce naturalmente bajo los efectos destructivos de los radicales libres, no se repara bien en las personas mayores.
¿Cómo se produce el EGF?
EGF se cultivaron por primera vez en células de levadura o humanas que no eran ideales por razones técnicas. Desde hace pocos años los científicos han descubierto métodos para generar factores de crecimiento estable a partir de células o microorganismos genéticamente modificados inofensivos, que es ideal desde el punto de vista sanitario. El ácido hialurónico que se encuentra en muchas cremas cosméticas se produce con similar proceso biotecnológico.
¿Cómo pueden los productos cosméticos con EGF ser beneficiosos para la piel?
El EGF aumenta considerablemente la regeneración celular de la piel. Más precisamente, se actuará directamente sobre las células de la piel para producir más colágeno y elastina. Actualmente, es el ingrediente activo más potente conocido para inducir tal efecto de estimulación y regeneración. Esta es la razón por la cual, los tratamientos de EGF pueden revertir los signos de envejecimiento y restaurar el colágeno y resto de elementos de la dermis a los niveles observados sólo en los jóvenes.
¿Cuáles son los efectos visibles del EGF?
Los resultados de múltiples estudios clínicos controlados han demostrado que la aplicación de cremas para la piel que contienen factores de crecimiento: Reduce la apariencia de líneas finas y arrugas Estimula la síntesis de colágeno Mejora la apariencia de manchas de la edad Reduce la pigmentación y las irregularidades de la piel Mejora la textura de la piel y su elasticidad
¿Cuáles son los beneficios del EGF en comparación con otros ingredientes cosméticos?
Debido a sus aplicaciones médicas desde hace veinte años y su uso en cremas médicas (post-quemadura), su seguridad de uso se ha estudiado más ampliamente que cualquier otro ingrediente cosmético. Otras cremas cosméticas pueden contener ingredientes para los que nunca se ha estudiado la seguridad a largo plazo. Peor aún, algunas cremas contienen ingredientes probados como nocivos (PEG, parabenos, sulfatos, etc …).